Notas que estimulan

Autor: Abelardo Ospina López
15 noviembre de 2019 - 12:00 AM

En contraposición a las que no, ya dadas al estimulante pueblo lector, llevamos a los ojos y conciencia del mismo, las siguientes, tomadas de variados libros y revistan, llegados a nuestro despacho de abogados en ejercicio:

Medellín

*La presencia en el territorio Patrio, “no se circunscribe únicamente a la extracción de un depósito de oro (o de esmeraldas) y el pago de impuestos y regalías. Somos socios del desarrollo regional, brindando transferencia de conocimiento mediante una minería moderna, altamente tecnificada, en armonía con el medio ambiente y trabajando con las comunidades vecinas”.

“La gestión está centrada en la de crecer con las comunidades, conociendo sus necesidades en territorio y aportando a la construcción de una visión compartida, que las empodere para que sean actoras del desarrollo”.

*La sociedad ha ofrecido a las mujeres la posibilidad de representar una serie de papeles en los que es definida por su relación con los otros. En el campo laboral, las mujeres más que indispensables, pero al mismo tiempo, subestimadas, han emprendido luchas por el reconocimiento y la aplicación de sus derechos, que hoy en día, continúan presentes en los proyectos de algunas artistas que procuran conquistar los terrenos sociales que han batallado sus predecesoras.

Lea también: Minería y soledad

*Ha escrito Juan Manuel Galán: “En tiempos oscuros es tentador renunciar a la política. Un sector importante de la población siente que las próximas elecciones, van a beneficiar a los mismos de siempre, que nada tienen que ver con los ciudadanos de a pie. Sin embargo, pese a la evidencia, tenemos el deber de creer que nuestras instituciones pueden mejorar. Si no creemos en ello, nada va a cambiar y perderemos el derecho a reclamar”.

*El Nadaísmo fue un movimiento que pretendió conspirar contra el orden, la estética, la literatura y la estrecha visión del mundo, que para los años 60, imperaba en las esferas social, cultural, filosófica, religiosa y hasta económica, de Colombia.

Alguna vez Gonzalo Arango A, escribió: “Nací en un pueblo sin gloria (Andes) que será famoso por mi nacimiento. No soy casado porque tengo fe en que el amor durará toda la vida y porque amar es mi manera de ser libre. Soy hostil al amor comprometido y a la literatura comprometida, pues en ambos casos, la belleza pierde su independencia. No tengo títulos ni menciones de honor. Estuve a punto de ser abogado, pero cierta inclinación a torcerlo todo, me desvió del Derecho”. La línea de mi vida –agregó-, según los astros, es una línea curva, difícil, que conduce a la gloria”.

(Tuvimos la satisfacción de ser su compañero cuando cursábamos el 3º y 4 de bachillerato, en su natal ciudad, Andes).

Compartir Imprimir

Comentarios:


Destacados

Carlos Vives
Columnistas /

Para adelante y para atrás

El Mundo inaugura
Columnistas /

EL MUNDO fue la casa de la cultura de Medellín

Mabel Torres
Columnistas /

Firmas y responsabilidad

Guillermo Gaviria Echeverri
Columnistas /

La desaparición de EL MUNDO

Fundamundo
Columnistas /

Mi último “Vestigium”

Lo más leído

1
Columnistas /

Cinco cosas a favor y cinco en contra sobre el comunismo extinto

Los comunistas son tan enfáticos en su convicción que con la mayoría resulta imposible hacer un diálogo
2
Columnistas /

¿Dulcecito o dulcesito?

El elemento que agregamos al final de una palabra para cambiar su sentido se llama sufijo… Este sufijo...
3
Religión /

Dos caminos alternativos simbolizados en la sal y la luz 

Hoy Jesús, en el evangelio de Mateo, nos presenta dos caminos alternativos simbolizados en la sal y la luz.
4
Columnistas /

La redacción correcta en el ámbito educativo

El vocablo bachillerato, en minúscula, alude de un modo genérico, a la enseñanza secundaria; si hay dos...
5
Columnistas /

“Godos” y liberales

Nuestros partidos políticos se alejan de ideologías extranjeras al mismo tiempo que se dedican a ensalzar...
6
Columnistas /

¿Glorieta, rompoi o romboi?

@ortografiajuanv explica las interrelaciones de culturas y la formación de nuevas palabras