Generar apropiación por el mar y su biodiversidad es el objetivo central de la estrategia de conservación que plantea desde Antioquia la diputada Ana Ligia Mora Martínez, militante del Centro Democrático y gran activista en los temas ambientalistas, además de ser su profesión.

Con este programa esta líder ecologista se vincula y se articula de manera práctica a la propuesta nacional del candidato a la Presidencia de la República, Iván Duque, llamada “Ambiente con futuro para todos”, específicamente en lo relacionado con el Plan de Gestión Integral de los Mares, con énfasis en la protección de las barreras naturales, entre ellas y de manera prioritaria, los manglares.

Precisamente la diputada Mora Martínez hizo hincapié en la trascendencia de esta estrategia para Antioquia, toda vez que este departamento posee la segunda costa más larga después de La Guajira y la costa más larga con manglares (cerca de 100 km). Esto, dijo, le confiere una función protagónica dentro del ámbito costero y una gran responsabilidad para su conservación.

Precisó que la costa antioqueña también cuenta con 5.687 hectáreas de manglares a lo largo de sus cerca de 500 km, pero no están legalmente protegidos por una figura de conservación, lo cual los hace vulnerables ante la tala ilegal que tiene su foco en el municipio de Turbo y a la acelerada expansión de la frontera agrícola.

Esta ambientalista dijo que los manglares y los humedales costeros son la primera línea de defensa ante la erosión costera, los mares de leva, las tormentas tropicales, el ascenso del nivel del mar y otros efectos del calentamiento atmosférico, de igual forma ofrecen múltiples servicios como:

1) El sostenimiento de la biodiversidad y de los recursos pesqueros

2) La regulación climática y de los nutrientes y sedimentos en el medio costero-marino

3) El acervo cultural y religioso

4) Y diversas oportunidades para la educación, la investigación, el esparcimiento, la recreación y el desarrollo sostenible.

Ana Ligia Mora hizo ver que todo lo anterior es poco conocido por la ciudadanía y recalcó que deberían ser motores o detonantes del desarrollo socio-económico para la región de Urabá y del Departamento.

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Por todo lo anterior, dijo que urge o es necesario construir una cultura del mar y de los manglares en los habitantes y dentro de los sectores académicos, estatales y empresariales que sean dinamizadores de acciones concretas.

“Los manglares han desaparecido o están desapareciendo en muchas partes del mundo, incluyendo el Caribe colombiano. El futuro de las comunidades de pescadores y de las mismas ciudades costeras dependerá de la permanencia de los manglares en el escenario de un progresivo ascenso del nivel del mar y de un incremento de la variabilidad climática que promueve las tormentas y las inundaciones costeras”, dijo.

Agregó que es necesario visibilizar los manglares en lo departamental, con la formulación de una política pública o un instrumento que permita establecer un marco jurídico y administrativo, que asegure recursos públicos y privados, locales, nacionales e internacionales, que motive y coordine acciones, y que posicione la importancia del manglar y su conservación entre los diferentes estamentos de la sociedad antioqueña.

El objetivo de esta diputada es, con motivo del reciente inicio del segundo período de sesiones ordinarias del 2018 (junio y julio), y apoyada por un gran equipo técnico, presentar ante la Asamblea Departamental de Antioquia y ante la comunidad en general, un proyecto de ordenanza que facilite el tomar acciones urgentes de conservación que incluyan restauración (plantaciones), desarrollo socio-económico alternativo, educación ambiental y sensibilización de la comunidad en general.

En ese orden de ideas, anunció que se presentará la propuesta para la conservación de los manglares del Golfo de Urabá y del Caribe antioqueño, para crear y promover una nueva cultura en el departamento que por medio de diversas estrategias resalte la importancia que el mar y particularmente los manglares tienen como patrimonio natural y como recurso vital para un crecimiento económico verde de la región de Urabá y de Antioquia, fundamentado en la equidad social y el desarrollo sostenible.

El proyecto de ordenanza propone visibilizar la importancia de este ecosistema y sus problemáticas, promover acciones para su investigación, conservación y divulgación del conocimiento, donde se pretende crear múltiples escenarios tanto en la ciudad como en los municipios costeros del departamento (Turbo, Necoclí, San Juan de Urabá y Arboletes).

“Como diputada del Centro Democrático, tengo como objetivo priorizar en los diferentes temas de la agenda departamental la protección y adecuada administración de los recursos naturales y en general del medio ambiente y buscar la articulación con las diferentes propuestas locales, departamentales y nacionales, para el tan anhelado Desarrollo Integral Sostenible en nuestro territorio”, terminó diciendo Mora Martínez.