De don Rodrigo a Bolívar a Gabriel García Márquez, los años han trascurrido y cada uno de ellos han escrito la historia de dos mujeres muy importantes en el país, Marta y Magdalena. La una es la santa de la ciudad, de la que se agarró don Rodrigo de Bastidas el día en que la conquistó y de una la bautizó como Santa Marta, la ciudad más antigua en América del Sur; la otra mujer bella y de larga cabellera, como largo es su navegar por once departamentos, la principal arteria fluvial del país, el río Magdalena, nombre del departamento que cobija a 29 municipios. La ciudad de Santa Marta es distrito turístico. La perla más tímida del Caribe, la más recatada y silenciosa. Pero de las tres, la que guarda los tesoros más valiosos. 
Una visita de conquista realizó a Medellín uno de los personajes que más sabe de turismo en Colombia, Fidel Vargas Salcedo, director de Turismo del departamento de Magdalena. 
Cómo no hablar con este hombre que no sólo se saborea las recetas de la cocina ancestral sino que se sabe el nombre de cada bahía, de cada iglesia, de cada una de las tres subregiones que conforman el territorio magdalenense.

¿Cuáles son las fiestas del departamento?
La fiesta de la capital es el 29 de julio, día de Santa Marta y desde 1959 se da una fiesta linda que es la Fiesta Nacional del Mar, en la que hay juegos náuticos y el concurso de reinas quienes compite por el título de Los Mares de Colombia. Es un trabajo que desarrolla la alcaldía de Santa Marta. Luego tenemos el Festival Nacional de la Cumbia, que sucede en el Banco en el mes de agosto con todas las comparsas de regiones del país que deben saber bailar la cumbia, este festival nació por iniciativa del maestro José Benito Barros y hoy lo dirige su hija. Otra fiesta es el Festival Nacional del Caimán, en el mes de enero en Ciénaga, es la historia del caimán que se comió a Tomasita en la Ciénaga Grande de Santa Marta y de ahí nació una danza muy bonita, es una fiesta de mucha cultura. En agosto tenemos el Festival Nacional de Música Vallenata con Guitarra. No se usa acordeón.

¿Hay alianza entre el departamento y el municipio para promocionar estas fiestas?
Sí, nosotros trabajamos de la mano con los municipios y estos reciben todo el apoyo del departamento con la gobernadora Rosa Cotes de Zúñiga. También hay ayuda de la oficina de turismo del departamento y de la oficina de cultura del departamento. En cada territorio y en cada pueblo hay fiestas. Hay festivales vallenatos, que son patrimonio del Magdalena Grande, Cesar, Villanueva y La Guajira.

¿Tienen algún programa bajo el tema de la moda o la gastronomía?
Somos ricos en gastronomía, tenemos platos que giran en torno del mar, como el que representa a nuestro departamento: el “salpicón de bonito”, este es un pescado que se pesca en la bahía de Taganga, es una receta propia que se sirve con arroz de coco y un puré de auyama con cebolla roja y aceite de oliva. Pero la entrada antes de este plato es una ensalada de pulpo con manta y tajaditas de guineo verde. Además tenemos el “cayeye”, que es lo más típico, es un puré de plátano que representa toda la subregión norte del magdalena, plato que nacío en el campesino y se prepara quitándole la cascara al guineo verde, se pone a hervir en una olla de agua con un tantico de sal, se cocina y cuando ya está blando se saca, se coge un tenedor con mantequilla no margarina, una gotica de leche caliente y se le echa queso rallado. Esto es un plato para el desayuno. Con el tema del banano estamos trabajando con el Ministerio de Cultura sobre la declaratoria de la región como zona bananera.

¿La comunidad de los Koguis ha permitido abrir sus puertas a los turistas? ¿Cómo es esto?
Es una decisión de un solo pueblo kogui, pero cada “Mamo”, quien es el rey o la autoridad del pueblo, decide y ellos vieron una oportunidad de ayuda, de sostenimiento de su comunidad y solo lo permiten dos veces a la semana, por dos horas solamente. Esto es concertado con las agencias operadoras. Ellos quieren ofrecer su comida y también aprender de nuestra cocina, ellos quieren aprender otro idioma. Es un avance ya que ellos están lejos de nosotros. Son seis etnias que habitan el departamento del Magdalena y han sobrevivido, pero cada día nosotros nos apropiamos de ellos, les quitamos sus cosas y por eso es que tenemos que cuidarlos. Nosotros en el departamento trabajamos para que ellos no desaparezcan en el tiempo. Ellos se casan muy jóvenes, los padres eligen con quién se casan, el hombre es quien hace la ropa de la mujer, de los hijos y la de él y la mujer es quien hace las mochilas.

¿Cuál es el proyecto que tienen con el tren?
Queremos llevar el tren desde Santa Marta a Aracataca, par esto estamos invitando a los gobiernos de Santander, Antioquia, Cundinamarca, y Cesar, ya que hay un esfuerzo que se ha probado con la carga y así llevarlo desde Santa Marta hasta La Dorada, Caldas. La gobernadora está preparando una cumbre de gobernadores para empujar el proyecto del tren de pasajeros, el Tren de Macondo, para que todos estos departamentos estén conectados, como existió hace 60 años, cuando nuestros abuelos pudieron vivir esta experiencia. Los rieles existen completos, una empresa inglesa con unos inversionistas colombianos hicieron una prueba de tren de carga de La Dorada, Caldas, a Santa Marta y es la entidad que tiene la concesión de la línea del tren, ya se han dado las instrucciones con el apoyo del gobierno nacional el Ministerio de Transporte. Hay viabilidad y  todo está funcionando, el país se debe conectar por tren como en Europa.

¿Cómo es el proyecto de hermandad con Sevilla, España?
En el mes de noviembre estaremos en Sevilla, España. La historia es que como don Rodrigo de Bastidas, nuestro fundador, es sevillano, vamos hacer un convenio de hermandad entre las dos ciudades. Se tiene pensado hacer una escultura que sea una obra de arte, de la cual la mitad esté en Sevilla y la otra mitad en Santa Marta.

¿Cómo se comporta la ciudad de Santa Marta?
Santa Marta es bonita, prospera, la gente es cálida, amable, recibe al turista con confianza, es una ciudad segura y tranquila. Las vacaciones son seguras, somos amables de nacimiento, una ciudad que cada día crece, se está mejorando la infraestructura del aeropuerto Simón Bolívar y el alcantarillado. De pronto, dos años atrás, llovió muy poco y esto dio escases de agua, pero se ha superado este momento difícil  y la alcaldía contrató un estudio con la Universidad de los Andes, el cual arrojó que lo mejor es que el agua se debe traer del río Magdalena, pero se está hablando porque hay otros ríos no contaminados y esto se está evaluando para ver qué es lo más pertinente. Hay una magnifica oferta de hoteles y de programas de turismo, las bahías, la Casa de San Pedro Alejandrino, las iglesias, el santuario de flora y fauna dentro de la Ciénaga Grande, los palafitos, que son los pueblos fundados en el agua y que son un gran atractivo turístico, Cañaveral, Taganga, Ciudad Perdida y tenemos un bus que es el atractivo que hace la Ruta de Macondo, que llega a la Casa del Telegrafista.

Fidel Vargas Salcedo
Nada más verle los ojos y el espíritu Caribe sale a relucir. Su pronunciación no es la del costeño que habla a mil y menos golpiao. Los de Santa Marta son otro cuento distinto. Su padre es cienagüero, pueblo patrimonio de Colombia, y su mamá de San Juan Nepomuceno. Comunicador social de la Universidad Autónoma de Barranquilla, siempre ha trabajado en el sector turismo desde el año 2003. Fue concejal de Santa Marta, fue director de la Casa de Juventudes y gerente de la red de turismo del Caribe colombiano, que fue el proyecto de las Tres Perlas del Caribe.